Suelo: Laderas orientadas al sur. El suelo está compuesto por una mezcla de arcilla, guijarros y grava. El terroir aluvial de Crozes-Hermitage está formado por terrazas de los ríos Ródano e Isère.

Vinificación: Crozes-Hermitage se vinifica de forma tradicional con en piletas de hormigón. Este vino se elabora a partir de uvas de cultivo ecológico. La exclusión de todos los productos químicos (en particular, los herbicidas) y el arado de los viñedos permiten que la vid introduzca sus raíces en el corazón del suelo. Las raíces más profundas hacen que el comportamiento fisiológico de la vid sea más uniforme y le proporcionan una mejor resistencia a las condiciones climáticas repentinas y variables. En cuanto a los vinos, un equilibrio más sutil y una mineralidad pronunciada distinguen a este vino de otros vinos de Crozes-Hermitage producidos a partir de este suelo sedimentario. La vinificación y el envejecimiento en piletas de hormigón realzan la sutileza del equilibrio.

Crianza: Alrededor de 12 meses de crianza, de los cuales el 85% se realiza en piletas de hormigón para preservar la frescura y mineralidad de la fruta. El 15% restante se cría en barrica, lo que le aporta consistencia y potencia, además de complejidad aromática.

De la mano de Michel Chapoutier, 7º generación de un proyecto familiar situado en el Valle del Ródano (Francia), nos ofrece un amplísimo y variado catálogo de referencias con una fabulosa relación precio-calidad. Vinos de las mejores denominaciones entre las cuales se encuentra la AOC Crozes-Hermitage, una pequeña región vinícola que, aunque en un inicio no era muy conocida, bodegas como M. Chapoutier han conseguido ponerla en el punto de mira con vinos deliciosos y de reconocimiento mundial.

Así es M. Chapoutier Les Meysonniers, un vino tinto procedente de viñedos de más de 25 años. Cepas de syrah plantadas en laderas con una ligera pendiente orientada al sur sobre suelo compuesto de arcilla, guijarros y grava. Se practica una agricultura ecológica y no se hace uso de productos químicos que puedan perjudicar el entorno y en todo momento se busca el sello propio del terroir.